El 22 de julio no fue un día más. Fue un recordatorio de por qué hacemos lo que hacemos.
Ocurrió en el Hotel Hilton, en San Salvador. Afuera, una mañana típica de la ciudad; adentro, el aire cargado de ideas, tecnología y conversaciones que valían oro.
Desde muy temprano, el equipo de Echo Technologies se alistaba: pantallas listas, MIA encendida, promos desplegados y un stand que no solo informaba, invitaba. No éramos los únicos. Éramos uno de los 24 patrocinadores, pero sabíamos muy bien por qué estábamos ahí.
La energía se sintió desde que abrimos el booth
A lo largo del día, más de 600 personas se movieron por los pasillos del evento. Pero no se trató solo de cantidad. Se trató de calidad.
Cerca de 50 empresas nos visitaron, muchas con preguntas específicas, con retos reales, buscando respuestas. Con el 90% de ellas, pactamos una reunión. No por insistencia. Por conexión.
Y mientras unos conversaban con nuestro equipo, otros jugaban con Echo Pac-Tech, una activación que convertía la lógica de Pac-Man en una dinámica sobre IA, potenciadores digitales y decisiones inteligentes.
Las ponencias no fueron solo presentaciones. Fueron conversaciones que necesitaban ocurrir.
Tuvimos el privilegio de subir al escenario en dos momentos clave.
Nuestra charla como Echo Technologies abrió el espacio para un tema urgente:
¿Cómo manejar los datos con inteligencia… sin perder el control?
Hablamos de IA privada, de infraestructura híbrida, y de cómo muchas empresas pueden proteger su información sin renunciar a la innovación.
Más tarde, nuestros aliados de Intelisis —que llegaron desde México— presentaron su nuevo ERP 7000, una solución que no solo automatiza, sino que aprende contigo. Un ERP con IA que se anticipa, analiza y se adapta.
¿Lo mejor? MIA estaba ahí. Y estaba despierta.
MIA, nuestra asistente virtual, recibió y respondió decenas de preguntas durante todo el evento.
Algunas personas se acercaron por curiosidad.
Otras porque ya sabían quién era.
Todas salieron con algo más que una respuesta: con una experiencia.
Al final del día…
Nos quedamos sin promocionales.
Sin voz.
Y con una gran sonrisa.
Porque este tipo de eventos no se trata de leads, métricas o reportes.
Se trata de personas.
De ver cómo una idea se enciende en alguien cuando entiende que sí hay otra forma de hacer las cosas.
Gracias, de verdad
Gracias a quienes se detuvieron a conversar.
A quienes se atrevieron a probar.
A quienes están cuestionando lo establecido, igual que nosotros.
Y, por supuesto, a Intelisis, por caminar con nosotros este camino.
¿Nos cruzamos en el evento y quieres retomar la conversación?
O si simplemente quieres entender cómo dar el siguiente paso en tu transformación digital, escríbenos.
Con gusto lo exploramos contigo.
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Porque la tecnología no cambia empresas.
Lo hacen las decisiones valientes.
